Durante el embarazo se producen importantes cambios fisiológicos en el cuerpo de la mujer a nivel musculoesquelético, hormonal, metabólico, físico y emocional. El cuerpo de la mamá está en continuo cambio para adaptarse al crecimiento del bebé a lo largo de los nueve meses de embarazo. Para ello se producen una serie de cambios fisiológicos en la mujer, a nivel pélvico, postural, perineal y abdominal que pueden desembocar a medio o largo plazo en diversas disfunciones como son la incontinencia urinaria, dolores pélvicos y de espalda, diástasis abdominal, diferentes tipos de hernias (discal, umbilical, prolapsos), y problemas circulatorios como piernas hinchadas, edema o varices.
Gracias a la fisioterapia obstétrica podemos conseguir aliviar estás molestias típicas del embarazo y que podáis disfrutar de esta etapa única en la vida de la mujer, acompañándoos en este proceso, aconsejándoos y haciendo más llevaderos estos cambios fisiológicos durante todo el embarazo.
El parto es un acto fisiológico para el que la mujer está preparada. Si bien es verdad que, el parto y el embarazo son uno de los mayores factores de riesgo en las disfunciones de suelo pélvico. Por lo que en Clínica Pelvia llevamos a cabo todo un protocolo para mantener tonificado el suelo pélvico a lo largo del embarazo evitando posibles problemas a fututo y para elastificarlo facilitando el momento del parto.
La alimentación, la práctica de actividad física y la gestión de emociones se consideran también tres pilares fundamentales para disfrutar de esta etapa con salud y plenitud. Por lo que en Clínica Pelvia, hemos creado un programa específico de seguimiento del embarazo que tiene en cuenta esta visión integral de la mamá embarazada. ¡Te esperamos!